El peeling químico es un procedimiento estético que consiste en la aplicación de sustancias ácidas sobre la piel para provocar su descamación controlada. Esta exfoliación estimula la regeneración de las capas cutáneas, revelando una piel más suave, luminosa y uniforme.
Dependiendo de la profundidad del tratamiento —superficial, medio o profundo—, el peeling químico puede actuar en diferentes niveles de la dermis, permitiendo tratar una amplia gama de imperfecciones cutáneas.
El peeling químico sirve para mejorar la textura y el aspecto general de la piel, corregir manchas solares, atenuar cicatrices de acné y suavizar arrugas finas. También es muy utilizado para controlar el exceso de oleosidad y tratar la hiperpigmentación.
Además, este tratamiento puede ayudar a estimular la producción de colágeno y elastina, favoreciendo un efecto rejuvenecedor natural. Es ideal para revitalizar la piel opaca o con signos de envejecimiento precoz.
El principal efecto del peeling químico es la renovación celular. Después del tratamiento, la piel comienza a descamarse, lo que permite la eliminación de células muertas y el surgimiento de una nueva capa más fresca y saudável.
Con el tiempo, se observa una mejora notable en la uniformidad del tono de la piel, la reducción de líneas de expresión y una textura más lisa. El resultado es un rostro visiblemente rejuvenecido y revitalizado.
Sí, existen algunas contraindicaciones importantes. El peeling químico no es recomendado para personas con infecciones activas en la piel, heridas abiertas, herpes, rosácea severa o piel muy sensible.
Tampoco se aconseja durante el embarazo o la lactancia, ni en pacientes que hayan utilizado isotretinoína recientemente, ya que aumenta o risco de complicações cutâneas.
El procedimiento inicia con la limpieza profunda de la piel. Luego, se aplica la solución química seleccionada por el profesional, de acuerdo al tipo de piel y al objetivo del tratamiento. Esta solución permanece en la piel por un tiempo controlado y luego se neutraliza.
Posteriormente, la piel puede presentar enrojecimiento, ardor leve y descamación progresiva durante algunos días. Es fundamental seguir los cuidados indicados por el especialista, como la hidratación intensa y el uso riguroso de protector solar.
La duración del efecto del peeling químico depende del tipo de peeling realizado. Los superficiales ofrecen mejoras temporales y requieren mantenimiento regular, mientras que los peelings medios y profundos pueden tener resultados duraderos por meses o incluso años.
Se recomienda una evaluación personalizada para determinar la frecuencia ideal de sesiones según cada caso.
El peeling químico está indicado para personas que desean mejorar el aspecto general de la piel del rostro, cuello, escote o espalda. Es ideal para quienes buscan tratar manchas, acné, piel grasa o los primeros signos del envejecimiento.
También puede ser una excelente opción para quienes desean preparar la piel para otros procedimientos estéticos, ya que mejora a absorção de ativos e potencializa outros tratamentos.
Para quienes no pueden realizar un peeling químico, existen opciones seguras y eficaces como:
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